El Proyecto Forestal Vichada inicia su camino hacia la certificación de huella de carbono

El Proyecto Forestal Vichada inicia su camino hacia la certificación de huella de carbono

Es importante el papel que juegan los bosques como reguladores de condiciones climáticas globales, actuando como reservorios de carbono y prestando servicio de sumideros de carbono atmosférico.

Aunque las políticas se han centrado en reducir las emisiones de GEI (Gases Efecto Invernadero), la creación de nuevos reservorios destaca en prestar el servicio de remover el CO2 (dióxido de carbono) y limpiar la atmósfera, esta acción es reconocida con la generación de UNIDADES DE EMISIONES REDUCIDAS (UER).

Bajo la asesoría del ingeniero forestal Andrés Sierra (experto en proyectos de carbono forestal), de acuerdo con la Ley 1819 de 2016, y el decreto 926 de 2017, nuestro Proyecto Forestal Vichada ubicado en el municipio La Primavera (Vichada), está en proceso de inicio de verificación y validación de la MITIGACIÓN, que generan reducciones de emisiones o remociones de GEI (gases efecto invernadero).

Hacemos parte del Proyecto “ Sombrilla Forestal Vichada ” que cuenta con 6.000 Ha, de las cuales 1.679 pertenecen al Fideicomiso Unión Global y José Narváez que corresponden a las fincas Andalucía y Galicia. Con la verificación y validación de reconocimiento de la compensación causada por el CO2, en Unidades de Emisiones Reducidas (UER) o Certificados de Emisiones Reducidas (CER) nos haremos proveedores en Bonos de Carbono.

¿Qué es la huella de carbono ?

La huella de carbono es el registro de gases de efecto invernadero (GEI) que empresas e individuos lanzan al planeta. Uno de los gases más tóxicos es el dióxido de carbono (CO2), que proviene del uso de combustibles fósiles que se usan (derivados del petróleo).

Algunos de los procesos que aportan carbono al medio ambiente y generan un impacto en el cambio climático:
• Consumo de energía
• Desplazamientos en vehículos; viajes en avión
• Calentar e iluminar la casa; usar los electrodomésticos

Compensar el daño.

Compensar la contaminación significa invertir en Bonos de Carbono. Estos son la unidad de transacción elaborada para reducir las emisiones.
Nacieron del Protocolo de Kioto, donde se impusieron metas concretas de reducción de CO2. Cuando una compañía reduce sus emisiones, tiene la opción de certificar esos gases que no lanzó al medio ambiente y convertirlos en bonos de carbono o en Unidades de Emisiones Reducidas (UER); estos pueden ser vendidos en el mercado de carbono, y ser pagados por empresas que contaminan y que a su vez compensarán esa contaminación comprando estos bonos.